En muchas de las formas y por el que el cristal que se le mire, la suerte de Ramón Castilla estaba complicada y no hubo milagro para cambiarla.
Los de San Luis se despidieron de la Copa Perú en Chiclayo, lugar designado por la Liga de la Libertad para pelear en un partido extra el cupo a la Nacional ante Mannucci de Trujillo.
Pero que a todas luces fue la mayor prerrogativa que contaron los carlistas para dejar en el camino a los ancashinos que al menos se fueron con dignidad del evento.
El dominio de Mannucci no se hizo esperar en base a su mejor plantel y juego, pero también porque jugar en costa, era una tremenda ventaja para el tricolor.
La autoridad impuesta por el equipo de Roberto Arrelucea se tradujo en gol, recién a los 27 minutos con el tanto de Janio Posito en el verde del “Elías Aguirre”.
Mannucci no cesó en sus ataques, precisaba asegurar la clasificación a la Nacional, y fue que a los 35, Juan Paico estiró la cuenta a dos.
El 2-0 a favor de los trujillanos y por un tiempo por jugar, era el cuadro perfecto para pensar que todo estaba consumado. Más aún que Mannucci halló la tercera conquista a 20 del final por obra de “piojo” Andrés López.
Los carlistas creyeron que los minutos restantes serían solo para cumplir y bajaron los brazos. Tamaño error que por poco estropeaba la fiesta tricolor, ya que Gerald Torres encontró a los 30 el descuento para los de Carlos F. Fitzcarrald. Pero fue el segundo tanto de Torres que asustó a los mannuccistas que con cierto susto afrontó los 10 minutos que restaba del compromiso. Los trujillanos pudieron calmar sus temores cuando a los 40, “el cholo” Víctor Andonayre enfiló un zapatazo para vencer al meta Palomino de Ramón Castilla.
Eso fue todo para los ancashinos, que murieron de pie, con la sensación que las cosas pudieron estar mejor pero que lamentablemente no ocurrió así.
Los de San Luis se despidieron de la Copa Perú en Chiclayo, lugar designado por la Liga de la Libertad para pelear en un partido extra el cupo a la Nacional ante Mannucci de Trujillo.
Pero que a todas luces fue la mayor prerrogativa que contaron los carlistas para dejar en el camino a los ancashinos que al menos se fueron con dignidad del evento.
El dominio de Mannucci no se hizo esperar en base a su mejor plantel y juego, pero también porque jugar en costa, era una tremenda ventaja para el tricolor.
La autoridad impuesta por el equipo de Roberto Arrelucea se tradujo en gol, recién a los 27 minutos con el tanto de Janio Posito en el verde del “Elías Aguirre”.
Mannucci no cesó en sus ataques, precisaba asegurar la clasificación a la Nacional, y fue que a los 35, Juan Paico estiró la cuenta a dos.
El 2-0 a favor de los trujillanos y por un tiempo por jugar, era el cuadro perfecto para pensar que todo estaba consumado. Más aún que Mannucci halló la tercera conquista a 20 del final por obra de “piojo” Andrés López.
Los carlistas creyeron que los minutos restantes serían solo para cumplir y bajaron los brazos. Tamaño error que por poco estropeaba la fiesta tricolor, ya que Gerald Torres encontró a los 30 el descuento para los de Carlos F. Fitzcarrald. Pero fue el segundo tanto de Torres que asustó a los mannuccistas que con cierto susto afrontó los 10 minutos que restaba del compromiso. Los trujillanos pudieron calmar sus temores cuando a los 40, “el cholo” Víctor Andonayre enfiló un zapatazo para vencer al meta Palomino de Ramón Castilla.
Eso fue todo para los ancashinos, que murieron de pie, con la sensación que las cosas pudieron estar mejor pero que lamentablemente no ocurrió así.
Foto: La Industria de Chiclayo
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