Juan Pablo II jugó su mejor partido al golear 6-2 a Barrionuevo que lo mantiene colíder del torneo.
Escribe Manuel López
Buscar en las fallas del arquero rival, la excusa perfecta para desmerecer la primera victoria con goleada de Juan Pablo II, resulta injusto porque simplemente los atigrados apabullaron a Barrionuevo.
El 6-2 final significó quitar el invicto al cuadro de la franja, seguir en la punta del certamen pero con un valor agregado que fue el buen fútbol expuesto sobre el verde del “Valeriano” el equipo atigrado. Y por si ello fuera poco fue la tarde soñada del delantero Juan Correa, quien rompió la saladera de no hacer goles desde su llegada al fútbol casmeño.
Barrionuevo fue un equipo aguerrido pero con gruesos errores defensivos, el primero de ellos fue casi autogol. El segundo error si fue trágico, cuando el arquero Ocaña increíblemente dejó pasar a los 18 un tiro suave de Luis Aldave. Era el 1-0 de Juan Pablo II que siguió atacando hasta hallar el 2-0 mediante Paul González, su primer gol (21) en el torneo, tras otro error de Ocaña.
Juan Pablo II vencía sin sobresaltos cuando el mismo Gonzáles mando de cabeza el balón al fondo de las mallas a los 36. De pronto, Miguel Asís (37) y Percy Rojas (42) ajustaron el marcador a un 3-2 que de cierta forma encendería el partido.
Lo cierto que que Juan Pablo II jugando bien, generó hasta la saciedad ocasiones para definir la contienda. Por un momento se pensó que no lo lograría la fallar tanto en la definición hasta que apareció Juan Correa para embocarla y marcar su primer en el torneo. También hizo el sexto de “taquito” para por fin romper esa mala racha. El delantero amrcó a los 23 y 45. Antes sobre los 39, “Pachín” había decretado el quinto gol.
Foto: Manuel López
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