NO LA SUPO HACER. En definitiva la programación de la séptima fecha del torneo no resultó existosa pues no se cumplió la meta de pasar los mil espectadores como se tenía pensando, pues apenas se llegó a los 985 espectadores.
SALIÓ LA CARA LA TARDANZA. Debido a que los árbitros chimbotanos Iván López y Raúl Chinchay llegaron con una hora de retraso a los partidos del sábado, sufrirán un castigo, tal como lo apuntó el inspector de los árbitros, Marco Llempén.
FUE UNA OFENSA. En un comportamiento totalmente reprochable, la barra de San Martín aprovechó que un balón de Cultural cayó a la tribuna para romperlo y entregarlo inservible nuevamente al campo de juego.
PERDONADO. El partido Cultural – San Martín tuvo un ligero retraso porque el técnico sanmartinense Ángel Apoloni no podía estar en el campo de juego al no portar su fotochek. Pero después de unos minutos la mesa de control decidió pasar por alto y permitió que Apoloni diriga sin su identificación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario